La primera imagen que nos viene a la cabeza cuando pensamos
en Estambul (o Bizancio/Constantinopla) es una mezquita (o camii en turco)…. y
generalmente no sabemos bien cuál Mezquita es, porque si hay algo que abunda en
esta ciudad bestialmente grande es precisamente eso: Mezquitas. Mezquitas,
mezquitas, mezquitas…. Para dar un número, el dato “oficial” es que hay
aproximadamente 3.000 mezquitas en la ciudad. Mires para donde mires, verás
una, no hay excepción….. Y de la misma manera, dispares para donde dispares con
tu cámara de fotos, te traerás una mezquita guardada en tu tarjeta de memoria…
(han contado la cantidad de veces que llevo escrito Mezquita en lo que va de
texto?? Exactamente esa es la sensación cuando uno está en Estambul...
sobredosis de mezquitas…)
Dicho esto, hay una mezquita que destaca particularmente
sobre las demás… bueno, quizás sean 2 o 3 las que destacan, pero
fundamentalmente la que más llama la atención es la conocida como Mezquita Azul
(nombre oficial: Mezquita del Sultán Ahmed (en turco, Sultanahmed Camii)),
obviamente haciendo honor al tipo que la mandó a construir, el Sultán Amhed I.
Como dato anexo, el barrio donde se encuentra la Mezquita Azul también se llama
Sultanahmed, y es lo que podríamos llamar el barrio más “turístico” de
Estambul…
Generalmente cuando uno hace un viaje, anota en su bitácora
personal los puntos destacados de cada lugar, los puntos no imprescindibles
pero prioritarios, y en función de eso se organiza. Pues bien, en función de
que al menos 3 de mis PP estaban en la zona de Sultanhamed, me escogí un hostal
en esa zona. Y al llegar a la parada de tranvía homónima (luego de perderme en
la ciudad, como siempre me pasa, y cuidado que perderse en Estambul, y de
noche, no es un tema menor….) lo primero que uno ve, obviamente, imponente, es
la Mezquita Azul…. La primera impresión es asombrosa, luego como pasa siempre,
uno ya acostumbra la vista de tanto pasar y pasar por al lado, y aunque
sigue impresionando, no es como la primera toma de contacto. En ese primer
momento, yo solamente quería llegar al hostal, por lo que la rodeé y pasé de
largo (además que estaba cerrada por la hora, no olvidemos que no deja de ser
un lugar religioso) pero en ningún momento dejé de mirarla y admirarla…. El
caso es que dejé la visita para el otro día a primera hora (?)….
Primera hora del día siguiente, me levanto, desayuno, y me
voy a la Mezquita Azul. Son apenas 3 calles de distancia desde el hostal, así
que en 5 minutos estoy plantado en la puerta… Lo primero que sorprende es que
la famosa Mezquita Azul… es blanca… (después sabremos que el nombre se debe a los azulejos de su interior, gran cantidad de azulejos de diferentes diseños y distintas tonalidades de celestes, que le dan un aspecto increíble al interior de la mezquita).
Dejé la visita al interior de la Mezquita Azul para el otro día, y me fuí a recorrer el Arasta Bazaar y la Santa Sofía.... Pero esa es otra historia....
Al otro día volví a la Mezquita Azul y esta vez sí pude entrar.... La entrada es por el patio trasero y, como en todas las mezquitas, el ingreso con zapatos está prohibido (?).... Ni zapatos ni zapatillas ni nada en los pies, hay que entrar descalzos (las mujeres, además, deben cubrirse la cabeza con un velo, y cubrirse las piernas si llevan falda o pantalón corto)... En la entrada hay un señor que entrega una bolsa para poner el calzado.... No hay problema de pisar nada raro, ni de sentir frío bajo los pies, ya que todo el recinto está completamente cubierto de una alfombra bastante espesa y suave....
En todo momento hay alguien rezando en las Mezquitas, por lo que el interior está separado con unas vallas: de un lado los turistas sacando fotos, y del otro los creyentes rezando, arrodillados mirando a La Meca... El interior es impresionante... Como ya dijimos, está cubierto en su totalidad de azulejos de diferentes tonalidades de azul, y del techo cuelgan unas arañas de luces enormes, que no alumbran demasiado, por lo que dan al lugar un aspecto un poco tétrico, pero encantador....
vero4travel - Qué visitar en Estambul
Hola Germán, muy interesante tu relato de tu visita a la Mezquita Azul, grande y grandiosa como pocas. Espero que te gustase la ciudad, como tu bien dices llena de mezquitas y también de bakkales (tiendecitas de barrio). Al menos eso es lo que parece por lo que cuentas... Ah, y un apunte: la mezquita (cami en turco, ya que la segunta i es una marca de genitivo) estaba cerrada el viernes porque es el día del señor... para los musulmanes, claro :) Un saludo y seguiré leyendo tus historias. Chau!
ResponderEliminarmuchas gracias por el comentario, y por el apunte del viernes, no sabía ese dato.... un saludo....
ResponderEliminarHola! me encanto tu relato :) yo vengo llegando de Marruecos y en Marrakech no pude entrar a ninguna mezquita ya que no permiten la entrada a los no musulmanes, pero la que si se puede visitar es la Hassan II en Casablanca asi que ahi si pude entrar... asi que es buena noticia saber que la de Estanbul tambien se puede visitar!! oye y podias entrar y caminar libremente o tenia que ser en grupo? (la de Casablanca tenia que ser en grupo)... y otra pregunta habia que pagar por entrar?
ResponderEliminarSaludos :)
hola Olga.... muchas gracias por comentar..! mira, en la Mezquita Auzl hay total libertad de entrar y caminar por tu cuenta, sin necesidad de ir en grupo.... de hecho yo fui solo y no tuve ningún problema.... obviamente respetando que es un lugar religioso y hay mucha gente siempre rezando, pero no hay ningún problema..... a la entrada te harán quitar los zapatos y a tí al ser mujer te harán cubrir la cabeza, y las piernas si llevas falda, pero nada más, la entrada es por el patio trasero y es totalmente gratis.... un saludo...:)
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